NOTICIA: Las y los trabajadores sindicalizados del Liceo Católico de Atacama llevan 34 días en huelga y sus dirigentes acusan que el directorio de la Fundación a cargo del establecimiento: “Solo ha entrampado la negociación”.
[Copiapó, 19 de junio de 2018] El 16 de mayo, 155 trabajadores y trabajadoras del establecimiento educacional de Atacama iniciaron su huelga con la esperanza de obtener un reajuste salarial justo, pero -a más de un mes de eso- no han conseguido llegar a acuerdo con su contraparte, el directorio de la fundación que contrala el Liceo.
A juicio de los trabajadores, el directorio “solo ha entrampado la negociación. Nos han hecho falsas promesas, cometido prácticas antisindicales y empujado a uno de nuestros compañeros a la huelga de hambre”.
El conflicto en el Liceo ha escalado a lo largo de estos más de 30 días, donde no solo se ha hablado de la negociación colectiva que iniciaron en marzo y que los mantiene en huelga, sino que también se han abordado otras problemáticas, como “la mala gestión y distribución de recursos, la deficiente administración económica y otras dificultades que nos preocupan a nivel de proyecto educacional”, afirmaron dos socios del sindicato, Mirla Narváez y Claudio Rubio.
En definitiva, el sindicato del Liceo Católico de Atacama está llevando una batalla en dos frentes. A raíz de ello, y con el apoyo de la senadora Yasna Provoste, sostuvieron una reunión en Santiago con el ministro del Trabajo y Previsión Social, Nicolás Monckeberg y el Subsecretario de Educación, Raúl Figueroa.
En la instancia, ambas autoridades se comprometieron en sus áreas a prestar apoyo al sindicato. Por su parte, “el ministro nos dijo que su marco de acción pasa solo por la negociación colectiva, así que se comprometió a solicitar que la Inspección del Trabajo continúe mediando, a pesar que ya pasaron 30 días de huelga”, afirmaron Narváez y Rubio, quienes estuvieron presentes en el encuentro.
Los 30 días, señalaron desde el sindicato, fueron clave, porque la empresa cometió un error al presentar la última oferta y la posibilidad de bajarse de la huelga se postergó del día 15 –como es habitual- al 30. “Solo 12 socios del sindicato aceptaron volver a trabajar, cuando comenzó el período de descuelgue, por lo que quedamos la mayoría de los socios y socias manifestándonos y esperando la resolución del conflicto”, afirmó la presidenta del sindicato, Amelia Donoso.
Ahora, la principal condición de los trabajadores es que se paguen los sueldos, porque, según sostuvo Donoso, “la plata ya está, el sueldo que nos deben corresponde a la subvención por asistencia de marzo y abril. De hecho, a los trabajadores que se descolgaron les pagaron sin ningún problema sus sueldos de mayo y durante la negociación ellos (directorio) firmaron un acuerdo con nosotros de que nos iban a pagar, pero no lo cumplieron”.
Esto último, y todos los conflictos que están viviendo actualmente, empujaron al profesor de música Álvaro González a llevar a cabo una huelga de hambre, que tiene como principal condición para bajarse que la Fundación cumpla con lo que están demandando los trabajadores: “Pago de sueldos, que el contrato colectivo sea más o menos acorde a nuestras peticiones, sobre todo conseguir el aumento de salario y, por ende, que se firme el contrato”, sostuvo Donoso.
Se suma a la situación de González, la toma del Liceo llevada adelante por los estudiantes del mismo, que comenzó la semana pasada. “Tienen un petitorio propio, y exigen reuniones con el obispo y con el directorio para presentarlo. Acusan, al igual que nosotros mal manejo administrativo, mala distribución de los recursos, deficientes y precarias condiciones de almuerzos, y además, nos apoyan en nuestras justas demandas”, finalizó la presidenta del sindicato.
Durante este martes los trabajadores deben decidir si aprobar la última oferta entregada por el empleador.