La minería asoma como uno de los sectores que tendría un atractivo impulso durante el segundo semestre. No obstante, los empresarios del norte del país son más bien cautos ante las altas expectativas generadas.
De acuerdo con el Informe de Perspectivas de Negocios publicado ayer por el Banco Central, al quinto mes del año los empresarios ya hablan de un “aumento en la inversión o estar preparándose para concretarla”.
A diferencia de las consultas anteriores, esta vez la mayor parte de los entrevistados ven que el repunte de la inversión se consolidaría a partir del segundo semestre, apoyado por “mejores cifras de crecimiento y de ventas”. En la medición anterior se esperaba sucediera en el cuarto trimestre.
No obstante, con la economía creciendo a un ritmo no visto en casi cinco años, una mejora en los indicadores de confianza tanto de consumo como empresarial y positivas proyecciones desde el mercado, la pregunta que muchos se han estado haciendo es cuándo se consolidarán estas expectativas para hablar de una recuperación económica generalizada.
Desde esa perspectiva, el repunte de la inversión y la reactivación de proyectos han sido identificadas como las principales trabas para el crecimiento por expertos y empresarios, situación que desde la visión de estos últimos ya tendría un horizonte más claro.
El sector minero sigue siendo uno de los que obtiene mejores perspectivas para este año basado principalmente en el alza del precio del cobre y la mejora de la confianza empresarial, pero se destaca de esta versión del informe un mayor “optimismo de que un ambiente regulatorio más favorable a la inversión permitirá la concreción de proyectos mineros en carpeta y el destrabe de algunos suspendidos por asuntos medioambientales”.
Así las cosas, los empresarios de la zona norte ponen paños fríos a las altas expectativas, apuntando a que el desempeño del sector no “equiparará el dinamismo que alcanzó a inicios de esta década”.